Amasya… arte en el desfiladero
Nos alejábamos del mar negro… atrás quedaban los largos paseos, las jornadas fotográficas y las tétricas prisiones descubiertas con entusiasmo. La brisa y los árboles daban paso a unas escarpadas montañas que, en algún momento, bañaban sus faldas en la costa del mar negro. Y allí, en un estrecho y angosto valle, a orillas del rio Yesil, nos encontramos con Amasya. Tierra de manzanas y a gran altitud a pesar de la cercanía con el mar, es un pueblo otomano, muy orgulloso de serlo, cuya orografía agreste y escarpada le infiere un aspecto casi de cuento […]